Las empresas que apuesten por implementar una estrategia global de gestión de los datos, aumentarán su valor y serán más rentables. Pero, a pesar de los beneficios, todavía son pocas las compañías que inician una estrategia para ser una compañía Data-Driven.
Ser Data- Driven no es solo una moda del presente, sino que es una tendencia de futuro. Según un informe de NewVantage Parners del año 2019, la analítica de datos en la actualidad tiene un largo recorrido, ya que, hoy en día, todavía es bajo el porcentaje de organizaciones que están aprovechando todo el potencial que tienen los datos en un mundo Data-Driven como el actual. Tan solo el 31% de los directivos encuestados consideran que tienen una empresa data-driven y solo el 28% responden que tienen un cultura Data-Driven implantada en la organización.
El mundo en el que vivimos está marcado por la explosión de los datos. Cada día los usuarios emiten miles de mensajes en las redes sociales y las compañías intercambian grandes cantidades de megas en los servicios en la nube más populares como Amazon Web Services, Microsoft Azure o Google Cloud Platform. Ante este panorama, se hace más necesaria la Data Governance.
Las compañías cada vez tienen que tomar decisiones más rápido y no pueden esperar días o semanas en encontrar la solución a un problema. Necesitan analizar los datos en tiempo real (Real Time) para resolverlo cuanto antes.
Una de las tendencias de los últimos años tiene que ver con el aumento de los datos que las empresas tienen que gestionar. Según diversos estudios, en los últimos dos años se han generado más datos que en toda la historia de la humanidad. Esta situación, que si no se sabe cómo abordar, puede ser un problema, en realidad es una oportunidad si se cuenta con las herramientas necesarias para aprovechar toda esta información en beneficio propio. Hoy en día, las empresas tienen a su disposición distintas soluciones de Master Data Management (MDM) que les permiten administrar toda la cantidad de datos que generan para obtener información crítica para la buena marcha del negocio. Todos estos datos, gestionados de una forma adecuada, pueden ser clave para la toma de decisiones.
