Convertirse en una compañía Data-Driven ha sido un objetivo común para muchas empresas en la última década. La gestión de los datos es una parte clave de la transformación digital y para lograrlo hay que ser los mejores en analítica de datos y en inteligencia artificial.
Durante los últimos años las compañías han tratado de administrar los datos como un activo importante y desarrollar en la propia corporación una cultura a favor del aprovechamiento de los datos en beneficio del negocio.
No obstante, el proceso para ser una compañía Data-Driven no es sencillo y en las últimas semanas lo ha constatado un estudio sobre el tema. Según la encuesta sobre Big Data y AI de 2019 de NewVantage, las grandes corporaciones como American Express, Ford, General Electric, General Motors o Johnson & Johnson están fracasando en su estrategia para ser Data-Driven.
Las grandes empresas no acaban de erigirse en compañías Data-Driven
Los datos más alarmantes de la encuesta son los siguientes: el 72% de los participantes han constatado que todavía no han forjado una cultura de datos; el 69% que ellos ha declarado que todavía no ha creado una organización data driven; el 53% ha afirmado que ellos aún no están tratando los datos como un activo de negocio; el 52% admiten que no están competiendo en la analítica de datos. Además, el porcentaje de las empresas que se identifican a sí mismas como Data-Driven ha bajado en los tres últimos años (37,1% en 2017, 32,4% en 2018 y 31,0% este año).
Estos números negativos se están produciendo a pesar del interés de las organizaciones en invertir en Big Data y en Inteligencia Artificial. El 88% de los encuestados aprecian que es urgente invertir en Big Data e Inteligencia artificial y la mayoría de las empresas encuestadas aseguran que las inversiones en Big Data e IA superan los 50 millones de dólares, un aumento de 10 puntos respecto al año pasado (40%). La mayoría incluso está implantando la figura del Chief Data Officer. Si en 2012 solo el 12% la tenía, hoy el 68% de las empresas encuestadas ya cuentan con esta figura.
Sin embargo, las organizaciones todavía tienen que superar una serie obstáculos para que puedan beneficiarse de las inversiones que están haciendo en Big Data y en Inteligencia Artificial.
Los retos que tienen las grandes empresas para ser Data Driven Companies
La encuesta revela que las empresas todavía tienen que hacer frente a una serie de desafíos antes de poder constituirse como Data Driven companies. Para el 77% la adopción de iniciativas de Big Data e IA es un gran desafío, en comparación con el 65% de hace un año.
Aunque estos desafíos no se encontrarían en la tecnología, ya que solo el 7,5% citan la tecnología como una amenaza. Las principales amenazas hay que buscarlas en el capital humano. El 93% de los encuestados identifica a las personas como uno de los principales obstáculos para avanzar en el camino de la transformación de la empresa en Data-Driven . En este sentido, el 40,3% identifica la falta de alineación de la organización con la misión y el 24% hace referencia a la resistencia cultural como uno de los principales factores para no culminar el proceso que las convierta en empresas basadas en los datos.
Existen además otras explicaciones que impiden que una compañía sitúe los datos en el centro del negocio. Seguramente la búsqueda de rendimiento económico a corto plazo relega los objetivos a largo plazo a un segundo plano, como es el caso del proceso de transformación de una empresa en Data-Driven.