En Elternativa nos tomamos muy en serio la buena gestión del dato, tanto que no la consideramos una mera actividad de negocio: entendemos el dato como una forma de llegar a conocer todo nuestro entorno, herramienta por tanto que nos sirve para cambiarlo en la medida que nos planteemos.
Es por ello que como consultoría digital, tenemos la misión de devolver el valor de los datos a tu empresa, pero como visión queremos ir más allá y ser capaces de devolver los datos a la humanidad. El planteamiento es sencillo: si tenemos las metodologías y tecnología para llegar al conocimiento que tu empresa necesita para crecer, estas mismas herramientas nos son útiles para cambiar la humanidad: el clásico pero por ello no menos cierto “piensa en global, actúa local”. ¿Y cómo lo hacemos?
Gestión de datos e información: una fuente de poder, una herramienta de cambio
Estamos acostumbrados a escuchar desde las escuelas de comunicación que la información es poder, incluso se define a los medios como ese “cuarto poder” con capacidad de controlar, intervenir e incluso manipular la opinión pública. Lo que esta visión sesgada e injusta, obvia que el manejo de los datos también permite cambiar, corregir y mejorar aquello que no funciona correctamente. La clave está en que ese manejo de datos sea “el correcto”.
Ya desde nuestros comienzos hace más de una década, formó parte de nuestro claim el lema “Nos apasionan los datos… no lo podemos ocultar”. Esta declaración de intenciones lleva implícita una pasión por lo que supone la información que los datos nos ofrecen, y como tal, entendemos su uso como un potente eje de decisiones que pueden llevar a quienes la usan a crecer exponencialmente.
Es este “poder” que realmente tienen los datos lo que crea el debate sobre su legítimo uso: como herramienta clave, su uso puede realizarse para el bien social, o propio, siendo este segundo aspecto el que debemos desvincular del término información para hacerlo plenamente válido dentro de la visión de “devolver los datos a la humanidad”.
Devolver los datos a la humanidad: mucho más que una declaración de intenciones
Desde Elternativa queremos incidir en que, como fuente de poder, los datos pueden ser una herramienta clave del cambio que nos lleve a, entre otros beneficios, poder cumplir con los objetivos de desarrollo sostenible planteados por la ONU para cumplir con ese deseado umbral 2030.
Estos dos conceptos, buena gestión del dato para empresas y ODS, nos puede parecer a priori que no tengan una relación directa, lo cual nos lleva a error, ya que es el correcto manejo de la información lo que nos permite conocer desde qué podemos hacer de forma particular y colectiva para el cumplimiento de los ODS, hasta abordarlos plenamente de principio a fin.
Es sencillo: tener todos los datos organizados, estructurados, validados… nos ayuda a tomar mejores decisiones, que como visión lo estamos aplicando al entorno de cualquier empresa pero ¿y si esta misma tecnología que ya está disponible para hacer del dato el centro de cualquier decisión, la usamos desde para diseñar un plan de vacunación global, hasta poder poner en común el conocimiento mundial sobre cualquier enfermedad para erradicarla?
Por esta razón, desde Elternativa hemos decidido desgranarte en las próximas semanas, cada uno de los 17 objetivos de desarrollo sostenible a través de cómo los datos ayudan a alcanzarlo.
¿Qué son los ODS y para qué sirven?
Antes de entrar en más detalles, empecemos por una definición más concreta de los ODS para poder entender su vital importancia. Así, según la propia página de Naciones Unidas, se tratarían de un conjunto de objetivos suscritos a nivel global para erradicar la pobreza, proteger el planeta y asegurar la prosperidad para todos como parte de una nueva agenda de desarrollo sostenible, que complementa a la emprendida en el año 2000 bajo el nombre de Objetivos de Desarrollo del Milenio. Cada objetivo tiene metas específicas que deben alcanzarse con fecha límite en 2030
La ONU también especifica dentro de su definición de ODS, la importancia de que toda persona se implique en la consecución, ya sean gobiernos, el sector privado, la sociedad civil o a título personal. De ahí a que cada objetivo quede abierto para su resolución en todos los ámbitos posibles y estén interconectados para que al abordar cada uno de ellos se facilite la consecución de todos.
¿Cuáles son los 17 objetivos ODS?
Tal como hemos comentado, la ONU plantea un total de 17 objetivos referenciados entre ellos y adaptados a diferentes niveles de actuación (como individuo, como empresa, etc.) cuyo abordaje nos permite cumplir con los pactado en la Agenda 2030. Estos objetivos son:
- Fin de la pobreza
- Hambre cero
- Salud y bienestar
- Educación de calidad
- Igualdad de género
- Agua limpia y saneamiento
- Energía asequible y no contaminante
- Trabajo decente y crecimiento económico
- Industria, innovación e infraestructura
- Reducción de las desigualdades
- Ciudades y comunidades sostenibles
- Producción y consumo responsable
- Acción por el clima
- Vida submarina
- Vida de ecosistemas terrestres
- Paz, justicia e instituciones sólidas
- Alianzas para lograr los objetivos
¿Cómo se pueden lograr los 17 objetivos ODS?
El planteamiento de cada uno de los objetivos y su interconexión con los restantes está pensado para que se puedan llevar a cabo desde distintos grados de compromiso y perfiles. Así, buceando en cada uno de ellos y de forma global a través de otras secciones de la página de la ONU, encontramos desde cómo cumplirlos mínimamente, -con acciones que podemos llevar fácilmente a cabo de forma cotidiana y sin apenas esfuerzo-, hasta cómo asumir la consecución completa de todos ellos.
Esta escala contempla desde acciones que van desde la concienciación (apagar aquello que no se usa) hasta la reivindicación (manifestar públicamente la inacción de empresas / gobierno / instituciones). Sea cual sea el grado de implicación, en todo caso estaremos trabajando para la consecución de los 17 objetivos.
Desde Elternativa en los próximos meses nos centraremos en cómo alcanzar el cumplimiento completo de cada ODS a través de los datos desde diferentes perspectivas: tanto micro, como macro. No es el sentido de estos artículos que desde hoy emprendemos dar consejos ni ser “espejo” de lo que una empresa con responsabilidad social corporativa debería ser al respecto de los ODS, sino de visibilizar cómo con un mínimo interés, el buen uso del dato puede servir tanto para crecer empresarialmente, como para hacerlo en un marco plenamente sostenible.
La información como eje de cambio para cumplir los ODS
Según información del sector, hasta un 23% de los datos que se manejan dentro de una empresa permanecen ocultos. Esto significa que un 23% de los recursos generados en una empresa, sea de la índole que sea, se desperdician en el sentido que no generan ni beneficio, ni resultan útiles.
Este hecho ya choca con el 12º objetivo: “Producción y consumo responsable” pero ¿y si el 23% de la información ignorada refiere a otros pilares como el correcto uso de la energía (7º objetivo), trabajo decente y crecimiento económico (8º objetivo) o comunidades sostenibles (11º objetivo) por poner un par de ejemplos?
¿Sabemos como empresa cuántos recursos energéticos gastamos?, ¿cuánto del trabajo de nuestra plantilla se puede mejorar y con ello aumentar la productividad?, ¿conocemos el impacto que tiene nuestra actividad en nuestro entorno más inmediato? Es este el tipo de información que permite el cambio que la ONU nos propone.
En los próximos meses iremos desgranando cada uno de los 17 objetivos y aportando cómo el manejo de los datos y el uso de tecnología en cada caso puede permitirnos cumplirlos, porque una década después nos siguen apasionando los datos, y creemos que es nuestro propio objetivo devolver el valor de los datos tanto a los negocios, como a la humanidad.